A raíz de la consulta de fin de año de una amiga por twitter me comencé a explayar en las experiencias familiares de tan hermosa labor y, que para algunos, puede llegar a ser un verdadero calvario.
Tengo la fortuna de que siempre me ha gustado cocinar. Desde pequeña he participado en la preparación de las cenas y grandes comilonas que nos pegamos cada vez que podemos. Finalmente no puedo negar que gran parte de mi vida familiar gira en torno de la mesa y, sobretodo, de la cocina.
Recuerdo que cuando niña las cenas de fin de año eran monstruosas y siendo aproximadamente doce personas, nos comíamos un cordero entero en la noche de navidad o año nuevo. Eso, más el arroz, papas y ensaladas varias, el postre (la típica torta helada de LB Q.E.P.D) y por supuesto, ALCOHOL. No me extraña mi eterno sobrepeso. Pero comíamos bien, y comíamos rico.
Obvio que ya no somos los de antes, la guata se pone fleta y ya no tolera los sapos y culebras que le echábamos antes, también los adultos se cansan más y ya entre el trabajo y el estrés de fin de año no tienen la paciencia para estar asando la carne de rigor lentamente y por varias horas. (Hay que viajar a Traiguén desde Concepción, desde Temuco o desde donde sea que estuviéramos... pero las horas de viaje y el calor, valen la pena)
Así que en mi experiencia de varios años (donde he ido escalando en las labores de la cocina: desde pelar huevos a tener a mi cargo un plato o el mismo coctail navideño este año) puedo permitirme compartir lo siguiente:
- A la hora de determinar el tipo de cena que harán hay que considerar lo siguiente: La edad de los comensales y su número. Luego de eso, que tan buenos pa'l diente son. (Por ejemplo, nosotros somos diez... ahí mi idea de degenerar la cena en un coctail con muchas cosas pequeñas, ceviches, canapés, cositas rellenas y mini-de-todo se va a la borda... salvo que quiera trabajar como china y ser constantemente esclava de la cocina, lo que unido a mi querido grinch de fin de año llamado DERECHO no hace más que construir un gigantorme y luminoso "N O")
- Ya, son hartos y comen y toman HARTO así que tal como en mi caso NO PUEDEN HACER COCTAIL. Debe tomar una decisión ¿QUIERE SER ESCLAVO/A DE LA COCINA?
a) SÍ: cocine lo que quiera y crea que va a llenar a sus comensales.
b) NO: En esto tengo experiencia así que puedo hablar con propiedad. Somos hartos y decimos que comemos harto (pero igual queda la mitad de la comida para el otro día) .
La idea aquí es prepararse con la correcta anticipación, cosa que cada uno pueda bañarse/vestirse/quedar bien rankiao para año nuevo y sentarse a la mesa como un ser humano digno sujeto de todo tipo de derechos humanos. También no olvidar que la gracia es que nadie tenga que estar de mozo de los demás y que todos podamos disfrutar de la cena... después de todo la mesa en uno de los lugares más diplomáticos que puedan existir (sobretodo porque mandan mis abuelitos y en esa instancia les gano a mis papás por goleada).
También debo mencionar que con mi papá intentamos compatibilizar CENA y COCTAIL, esto, para erradicar el tema mencionado en el párrafo anterior. (los más "grandes" de la casa no nos pescan mucho, les falta costumbre... pero servirle un platito con cosas varias a un par de personas no hace daño) Nuestra cena básicamente consiste en una carne fría rebanada, un "pollo cocido" (de acá de la casa y preparado por mi abuelita y de ahí mismo hace un consomé MORTAL) y si hay, un pescado. Una salsa rica para la carne y el acompañamiento, en donde se puede variar desde ensaladas hasta papas (ej: papas asadas + mantequilla/aceite de oliva + romero + ajo) y verduras horneadas. La gracia es que todo esté listo varias horas antes, rebanar todo, ponerlo en unas bandejas bonitas adornadas con unas lechugas y/o frutas de estación -zarzaparrillas, moras, maqui, murta- para darle color al plato y luego cada uno escoge lo que quiera comer. Lindo y fácil.
Lo más importante: DELEGUEN. Sobretodo las cosas fomes como pelar huevos, pelar papas, tomates, etc. FOMEDAT. Y el postre, que también suele ser un cachito de aquellos, no obstante la cantidad de frutas ricas que hay en este tiempo (brochetas de verduras puestas en un melón + chocolate derretido FTWWWW).
Ahora el coctail: porfi, no llenen a la gente con pan, queso y papas fritas de bolsa. Unos mini ceviches, por ejemplo. También del coctail de navidad robé la idea de hacer panqueques y rellenarlos con pasta de pollo, pasta de atún (con mayo y pimientos y morrón para darle más textura) y queso/salmón. Se cortan tipo sushi y cha-chán! algo rico, pequeño y fácil. (consejo: dejarlos en el congelador unos 30 minutos para que no se desarmen a la hora de cortarlos). Más ideas para el picoteo
ACÁ (en aperitivos).
Saliendo ahora un poco de lo que hacemos en mi casa comparto un par de ideas para una cena para pocas personas y con poco tiempo. Sólo basta tener un horno bonito y buena materia prima.
Los materiales son los siguientes
- Papel Mantequilla
- Pescado limpio, con la menor cantidad de espinas posibles.. (merluza, por ejemplo)
- Verduras varias (cebollín picado a lo largo, zanahoria, papas, tomate, etc. básicamente cualquier verdura que les agrade como quedan con pescado)
- Vino Blanco
- Aceite de Oliva
- Sal y pimienta
Pongan a calentar su horno.
Pongan su papel mantequilla sobre la mesa y doblenlo por la mitad. Dejen un marco imaginario y más o menos en la mitad del papel pongan una cama de verduras (el cebollïn, la zanahoria, el tomate picado en gajos, papas cortadas en bastones (entre 4 u 8 por papa, dependiendo del tamaño) sal pimiente las verduras. ponga el pescado aliñado, ponga una rodaja de limón enima, rociar con aceite poner un poco de vino blanco y cerrar lo más herméticamente posible.
Cocinar entre 20 y 30 minutos a horno medio, -mientras se bañan, arreglan, etc- Dejar reposar unos minutos
Servir las almohaditas en el plato y abrir al momento de servir :)
Ta-daaah!
Ahí tienen una idea innovadora y rápida.
No olviden ponerle harto amor a lo que hacen, para mi es lo principal.
Besis.